4º DÍA BUSCANDO UN RAYO DE SOL

Quien me conoce sabe que hay tres cosas que siempre me ha gustado hacer (entre otras) y que por circunstancias, hace unos años (no abandoné) pero si dejé en la cola de espera. Escribir, dibujar y la fotografía, pero me doy el gusto de volver de vez en cuando.

Tras esta crisis habrá un antes y un después en nuestras vidas, quiero transmitir mis emociones día a día recluida en casa. Seguramente muchos os podéis sentir identificados, unos más otros menos, pero creo que puede servir para plasmar sentimientos y sacarlos. Debemos ser conscientes de todo esto y de la importancia y la transcendencia que hoy puede tener para nuestro futuro el cumplir con una gran misión, LA SOLIDARIDAD.

Ahora que tenemos mucho tiempo para pensar y para hacer cosas, que hasta hace poco dejábamos de lado, esta etapa nos ayudará a replantearnos la vida, estoy segura que quedará reflejado en nuestras vidas para siempre. Un recuerdo clavado en el corazón de una forma dolorosa, diferente y no menos única. Por ello, ayer me planteé la iniciativa de escribir una líneas día a día y los efectos que en nosotros irá creando.

Creo que merece la pena que quede patente para las futuras generaciones, y para nosotros, lo cual, nos servirá para no cometer los mismos errores del pasado.

El retiro (no espiritual, pero está en proceso de serlo) lo estoy llevando bastante bien. Me propuse seriamente cumplir un horario y fijarme objetivos. También es cierto que continuar con el trabajo en la modalidad online y acudir a la oficina una o dos veces por semana, exclusivamente para asuntos que requieran de mi presencia, ayuda un poco a que el tiempo se haga más ameno.

El primer, segundo y tercer día de reclusión fue para todos una mezcla de sensaciones, como tristeza, novedad, preocupación, miedo, incertidumbre, euforia y en algunos casos mucho humor (lo cual ayuda a llevarlo mejor). Pero si es cierto que desde ayer y esta mañana los ánimos empiezan a decaer, y navegamos en un mar de olas y en un mar en calma.

Desgraciadamente, a lo mejor más pronto que tarde nos estaremos concienciando de que esto no es ninguna broma y que el sacrificio será mucho mayor a nivel emocional, a nivel macroeconómico y microeconómico, que en un principio nos hicieron creer.